Poesia a la fuerza

jueves, 28 de julio de 2016

Capicúa #1

Algo no me cuadra, adoro lo que odiaba
Me alegra lo que me cabrea y adoro tu mirada
Me doy hasta asco, por caer en lo mismo
En lo mismo de siempre, lo mismo que me mata

La angustia me frustra, la impotencia me rabia
Me quedo atontado, me encanta tu labia
Me matan tantas cosas que me acostumbro al veneno
Y mi mayor veneno fue la distancia

El estomago se me encoje, y todo se para
Me miras de reojo y me arrancas el habla
Balbuceo, me haces reo, caigo en tus garras morfeo a ver como me tratas

Te veo hasta que desaparece la claridad
Luego te leo hasta hasta que los ojos no pueden mas
Me quedaría hasta el final escuchandote
Malditas sirenas siempre acaban jugandomela

Nada me gusta, lo bueno breve y corto
Eso dicen, yo de bueno llego a tonto
Eso nadie lo dice. Hubiera querido que pasara lento
El tiempo que disfrute del roce de tu piel

Ya ni rimo, ¿para que? He perdido el ritmo
Por seismos en mi sien. Me pondré por himno
Nunca abandones y lucha por lo que quieres
Como ella ninguna, como el resto mas de cien.

Me he hecho amigo del fracaso, del rechazo de los hechos
Lo descubrí anoche escribiendo mis versos en tu lecho
Ha sido, fugaz, destellante o volátil, pero quedo en mi pecho
He llegado a tocar el fondo y hacer el pino para tocar el techo

Que mas da autoengañarme otra vez mas
Ya es cotidiano, ni la lírica me calma
Ni me salva, lo que pensaba que sería mi cama
Fue mi ataúd, no me mataste tu, me mato una taquicardia

Que llaman nostalgia, y que palpita rápido
Su cura es la caricia, su síntoma los látigos
Odio los empalagosas yo estoy hecho de romántico
Somos una caja de sorpresas, somos enigmáticos

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